Técnica de entrevista
Como ya se ha dicho, es una
conversación que se sostiene con un propósito concreto y, como tal, es un
asunto de dos vías, un intercambio planeado de expresiones. La información es
la parte vital del proceso de investigación. Si un investigador no puede obtener
información, no puede desempeñar su tarea debidamente.
Realizar una entrevista adecuadamente
no es sencillo, pues exige del entrevistador un gran conocimiento y dominio de
si mismo, adiestramiento y experiencia, ya que la entrevista es una técnica que
requiere practica constante para que el entrevistador sensibilice sus
aptitudes.
La entrevista es más un arte que una ciencia,
no todos las personas pueden entrevistar. Se dice, Muchas veces no se descubren
a los involucrados por una falta de técnica en la entrevista, por ser
inapropiada o por ser incompleta (preguntan poco inteligentes y poco cuidadas).
De este modo. se han descrito una serie de cualidades que todo entrevistador
debe poseer.
Entre ellas tenemos:
a. Perseverancia
o constancia para realizar
entrevistas, que implica no desanimarse por eventuales fracasos, los que por el
contrario deben constituirse en estímulos que le impulsen a continuar luchando
en busca de su perfeccionamiento. Debe apegarse a su trabajo de los numerosos
obstáculos que se pueden encontrar.
b. Honestidad
e integridad personal. Implica la
incorruptibilidad, pues el entrevistador puede estar expuesto a toda clase de
tentaciones físicas, emocionales y materiales, las cuales, huelga decir, que
debe rechazar oportunamente.
c. Tacto y
discreción, respecto a la
formulación y al contenido de las preguntas realizadas, teniendo especial
cuidado con aquellas de carácter personal que pueden afectar la dignidad del
sujeto y que sólo sirven para complicar la situación.
d. Habilidad, la cual no siempre debe poseerla, sino que debe demostrarla
para escuchar, hacer preguntas, pensar lógicamente, observar e interpretar,
apreciar el punto de vista del entrevistado, guiar y controlar la entrevista.
e. Autocontrol al tratar con alguien, deben siempre ser eficientes,
corteses, amables y cuidadosos de su lenguaje ya que representan a su dependencia
y la impresión que dejen es la que el público tendrá de su unidad.
Por tanto, la técnica debe siempre ir
dirigida a entablar una buena armonía entre el médico y el paciente y evitar
interferencias que entorpezcan los objetivos de la entrevista; no debe estar
influida ni por los prejuicios del entrevistador, ni por la necesidad que
siente el entrevistado de causar buena impresión.
El profesional elegirá el protocolo que
mas se ajuste al caso o con el que tenga más habilidad por su experiencia. El
investigador debe utilizar un proceso tipo “embudo” empezando con preguntas
abiertas y al final, si es necesario, hará preguntas enfocadas, nunca sugestivas o conductoras.
Figura 1. Preguntas directas e indirectas en la entrevista psicológica |
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